En un nivel básico, la arquitectura es importante para la sociedad, porque proporciona el entorno físico en el que vivimos. En un nivel más profundo, la arquitectura proporciona una expresión de la civilización humana en el tiempo, que permanece luego, como el caso de los monumentos, para su estudio por las generaciones futuras.
La arquitectura es una expresión de la verdadera fuerza de una sociedad, porque las cosas que los humanos más valoramos son aquellas que son casi irrevocables, casi «para siempre».
A diferencia de otras formas de arte, la arquitectura se encuentra a la vista y es difícil deshacerse de ella, nos rodea cuando caminamos por las ciudades del mundo. La arquitectura es una expresión relativamente permanente de cómo la sociedad se ve a sí misma en su conjunto. Es un poderoso reflejo de la cultura humana.
La arquitectura es en parte arte y en parte ciencia. Una mezcla entre razón y emoción está siempre presente en la buena arquitectura. Como arte proporciona una forma de expresión creativa que lleva a la sociedad a mirar su espacio de vida y el medio ambiente en general de diferentes maneras. Al mismo tiempo, la buena arquitectura responde a las necesidades funcionales de la sociedad.
¿Por qué es importante la buena arquitectura para el entorno?
Porque la población mundial está creciendo rápidamente, con una última estimación de llegar a los 10 mil millones de habitantes antes del 2050, si China e India siguen al ritmo actual. Al mismo tiempo que la población está creciendo también se está urbanizando. Este proceso es un reto enorme para la humanidad y el medio ambiente. Sin embargo, también se presenta como una gran oportunidad para una mayor sostenibilidad si lo hacemos bien. La arquitectura tiene un papel fundamental en la forma de las casas y por tanto en la vida de todas las poblaciones. Si diseñamos bien nuestras ciudades podremos reducir la necesidad de viajes largos cada día para ir al colegio o a comprar el pan. Si diseñamos bien nuestros edificios, de manera que proporcionen energía en lugar de consumirla seremos más sostenibles y también podremos mantener abiertas las opciones para tener un futuro.
¿Por qué la arquitectura es importante para la salud?
La arquitectura y diseño urbano tienen un impacto directo en nuestra salud de varias maneras. En primer lugar afecta a nuestra actividad física. Las personas pueden ser animadas a ir a pie o bien en bicicleta, como medio de transporte habitual, siempre y cuando el diseño de la ciudad permita que esto sea posible de manera segura y conveniente. ¿Y por qué es esto importante? Porque la actividad física regular es buena para una prevención de una variedad de problemas médicos, incluyendo enfermedades cardiovasculares, diabetes e incluso enfermedades mentales. La buena arquitectura también puede reducir los problemas de salud laborales. El estrés puede ser reducido y la salud mental mejora al asegurar que, cuando sea posible, los usuarios de un espacio de trabajo puedan tener un control directo sobre el lugar. Por ejemplo el simple hecho de permitir a la gente abrir ventanas y ajustar la iluminación contribuye a un espacio de trabajo más armonioso y mejora notablemente la salud al no tener que estar obligados a estar siempre bajo una luz intensa o bajo los nocivos efectos del aire acondicionado.
Uno de los mejores ejemplos del mundo está en Australia, donde la Ópera de Sydney, que es inmediatamente reconocible en todo el mundo, representa a la ciudad y al país, y nos transmite en seguida sus valores: una metrópolis, al lado del mar, que adora la vida al aire libre y la cultura.
No hace falta que les cuente cuáles son los beneficios de una ciudad con una identidad positiva: mayores niveles de calidad de vida, atractivo turístico, negocios internacionales, etc.
¿Pero qué es lo que hace que un edificio se considere buena arquitectura? ¿Cuándo se convierte un edificio de arquitectura en arte? Ya lo dijo Vitruvio, hace mucho tiempo, escribiendo en la antigua Roma alrededor del año 30 a.c., cuando identificó los tres elementos esenciales, pero a menudo en conflicto, de toda gran arquitectura; lo que llamó » los productos básicos, la firmeza y la alegría». Son lo que podríamos denominar hoy función, para satisfacer las necesidades de los que habitan un edificio; estructura, para mantenerse en posición vertical y protegernos de la lluvia, y la belleza, por una aportación estética.
La arquitectura se convierte en arte cuando encuentra una resolución en esos imperativos mediante la creación de la pasión en su tensión. Un edificio no es arte simplemente porque sea virtuoso y funcional o porque sea sostenible o socialmente equitativo. Esto no es suficiente. Se necesita algo más, la buena arquitectura es solo aquella que nos emociona o nos produce un shock, una sensación de satisfacción, placer y felicidad click to read. Cuando caminen por las calles de su ciudad eleven la vista y observen qué les emociona .
La arquitectura es cultura
La arquitectura es una de las grandes expresiones culturales que define la identidad de los lugares. ¿Cómo se percibe una ciudad en el mundo? La respuesta se reduce a las personas, el medio ambiente físico y la cultura. La arquitectura se encuentra en un bucle continuo entre los tres. Para una ciudad, la arquitectura representa la ropa con la que se viste para una entrevista de trabajo.
Fuente: eldia.es